1.19.2009

Un Mocca Blanco Grande para llevar, por favor...

Terrible mañana, terrible... Ahí va el guión, estoy pensando en registrarlo y hacer la película.

Librería Ocho y Medio:
YO: (sonriente) ¡Hola, buenos días! Buscaba "Diccionario de Cine" de Concepción Calvo...
DEPENDIENTE GAFAPASTA: (ausente) Pues no nos queda, nos llegará.
YO: (ya no sonrío) ¿Cuando?
DF: En unos diez o quince días. Te lo puedo reservar.
YO: No, mira, es que tengo un examen el día dos en el que me entra ese libro...
DF: Con Concha, de la Complu, ¿no?
YO: Toda una institución... Hasta luego, gracias...

[Gran Vía: Chica de Intermón Oxfam "¿Tienes un momentito?"]

Fnac Callao:
YO: (con cara de "hasta el coño") Hola, mire, buscaba "Diccionario de Cine", de Concepción Calvo...
DEPENDIENTA ESTRÁBICA: Mira, pues de Concepción Calvo tuvimos uno que se llamaba "Empresa Cinematográfica", pero no viene hace años y ese no me figura. Prueba en Ocho y Medio.
YO: No, mira, vengo de allí, voy a probar en La Casa del Libro (todo esto mientras pienso "¿a qué ojo la miro?").
DE: Suerte, gracias.
A todo esto, me compré un DVD y dos libros, ojo a la mezcla: Isla Ignorada, de Gloria Fuertes, y Suck my duck, de Ralf König.

[Gran Vía: Encuestadora "¿Te puedo hacer una encuesta de Chips Ahoy?". Yo "¿Cómo?"]

Casa del Libro:
YO: (quemadísimo) Hola, mire, bucaba el "Diccionabububu blúblú de Cine", de Conceblof Ploff.
DEPENDIENTA VAGA: En la segunda planta.
Cola en el ascensor, hala, escaleras arriba...
YO: Hola, buscaba... Buaaaaaaaaa! Dios, ¿por qué me odias?
DEPENDIENTE MARIQUITA: Pues no lo tengo... ¿Te lo encargo? Llega en unos diez o quince días, y si no, busca en Ocho y Medio...
YO: ¿Tienes una cuchilla? Tengo unas venas que cortar por aquí por el brazo...
DM: Voy a ver en otras tiendas. Ah, mira, sí, queda uno en la que está enfrente del Cortilandia, y otro en la de Fuencarral.
YO: (me voy corriendo) Gracias!!

[Calle Preciados: Un hombre me da publicidad de nosequé centro de estudios que pone "Hazte técnico en Comunicación Audiovisual" (Venga ya, por favor, ¿esto es de cachondeo?)]

Casa del Libro (enfrente de cortilandia):
Después de una cola de dos horas, detrás de unas filipinas pidiendo al dependiente que les busque ocho libros diferentes con ocho títulos enormes, decido ir a buscarlo yo. Viene el dependiente:
DEPENDIENTE LENTITO: ¿Te busco algo?
YO: "Diccionario de Cine", de Concepción Calvo
DL: No sé si nos queda.
YO: (gritando histérico) ¡SÍ, OS QUEDA UNO, QUE ME LO HAN DICHO! Buaaaa, buaaaa!
El dependiente se va a buscarlo... Cinco minutos después:
YO: Oye, mira, que ya lo he encontrado. Gracias.
Pago, y me voy a Fuencarral a por el otro, para Marta.

[Calle Fuencarral: Vendedor de 'La Farola' "Oye, amigo... ¡Amigo! ¡¡AMIGO!!". Yo "¿Amigo de qué, vamos a ver, de qué?" Dios, a veces me siento mal por las cosas que salen de mi boca]

Allí ya decido buscarlo yo mismo, claro... Y ahí está, esperándome... Con su foto de Concha en la solapa, esa grandísima genia, esa mujer que está por encima del bien y del mal, pero coño lo que me ha hecho sufrir esta mañana...

A lo largo de la mañana, había percibido que hace el viento más bestia que he podido ver en toda mi vida... Y claro, ¿habéis oído eso que dicen de que el viento vuelve loca a la gente? Pues en kilómetros de calle, autobuses, líneas y estaciones de metro, me he encontrado como a mil quinientas personas hablando solas por la calle, con la mirada perdida... Miedito.

Así que bueno, una vez salí de la tercera Casa del Libro, decidí homenajearme en el Starbucks, donde el barista delgadito mariquitilla siempre me tira los trastos, y oye, he de decir que me encanta que lo haga, lo admito, me siento bien... Y mejor aún con un Mocca Blanco Grande para llevar, con extra de Mocca Blanco, para intensificar ese dulce final que ha de tener toda mañana ajetreada...

Eso sí, antes de volver a casa, he pasado por el supermercado, por aquello de poder comer, y tal. Y creo que he dado un poco la razón a Javier... Son un poco 'sucursales del infierno', especialmente si estás hasta las narices de aguantar a la gente, y aún te espera toda una tarde de trabajos, clases, etc. ¿Alguien me da el teléfono de algún camello? Creo que necesito drogas duras...

3 comentarios:

Zacarias Volta dijo...

para la proxima por que no relatas las aventuras que tendrias que haber pasado en las bibliotecas publicas, si el caso hubiese sido que no lo tenian por ninguna tienda. otro mundo, lleno de abuelos con revistas, adolescentes haciendo como que estudian y bibliotecarias asesinas. todo por un libro...

Beatriz del Hoyo dijo...

Llevo toda la tarde estudiando con una desazón horrorosa, hasta que he decidido hacer un descanso... y me he encontrado con tu entrada del blog. Me encanta. Es buenísima. Pero sobre todo, sobre todo... cuánta razón en aquello de ¿por qué los que se ponen a pedir en la puerta de los supermercados nos llaman "amigos"? Jajaja, me parto.
Me encanta.
Muaks

Unknown dijo...

querido rubén, creo que te habrías evitado todas esas molestias si el dichoso diccionario se lo hubieses encargado a Nacho, el de la libreria de la facultad, además, él es mucho más diligente, de todos modos me ha hecho mucha ilusión leerte, espero haberte puesto buena nota, un abrazo, c. calvo.